CONCLUSIÓN
Me he dado cuenta que en mi trabajo no solo consiste
en dar un solo número o poner fin a una actividad, al contrario, debe de ir
acompañada de un proceso de enseñanza-aprendizaje, todo con un fin el cual es
dar a conocer al pupilo de manera oportuna su desempeño así el podrá realizar
las correcciones necesarias; todo con el objeto de mejorar su competencia.
Una pequeña retroalimentación es de suma importancia
para los pupilos donde ellos pueden anotar lo que les gusto, lo que no les
gusto, así como sus aprendizajes, logros y dificultades.
El
trabajo de un docente no solo consiste en enseñar, sino en registrar todos los
avances que tiene el niño en donde mi manera de trabajar y evaluar es
constante, en este tema siempre se estuvieron calificando con pequeñas rubricas
que le permitían a los alumnos ver sus dificultades y sus fortalezas.
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